Los distintos medios de pago internacionales se encuentran supeditados a las leyes y normativa financiera de cada país, tanto en lo que respecta a la obligación de comunicar los datos al estado, como en lo que se refiere a los límites de las cantidades que se pueden enviar o recibir. En el caso de España es obligatorio cumplimentar el modelo S1, en el que hay que declarar el origen y el destino de los fondos. El incumplimiento de estos requisitos puede llevar aparejado el bloqueo de los fondos y otras sanciones económicas muy importantes.

Los medios de pago internacionales son herramientas que se utilizan para adecuarse a nuestras necesidades financieras, según el tipo de pago y las garantías necesarias, así:

La tarjeta de crédito

Es el medio de pago más extendido por los particulares. Se utilizan para pagos presenciales, bien físicos mediante TPV o bien virtuales, como por ejemplo los pagos en cualquier página web.

Las transferencias bancarias

Este método presenta las restricciones propias del límite de cargo que tenga la cuenta.

Las transferencia Swift

Se articulan por la Society of Worldwide Interbank Financial of Telecommunication para que los movimientos de capitales de los distintos mercados financieros se realicen con facilidad, rapidez y seguridad. Las transferencias swift son irreversibles por lo que es primordial que exista plena confianza entre el receptor y el emisor del pago. Por ese motivo, este medio de pago se utiliza entre particulares o empresas que tienen una relación comercial sólida.

Las cartas de crédito internacionales

Son un compromiso de pago frente a terceros. En esencia, son un aval bancario que desplegará sus efectos cuando se presenten una serie de documentos. Por ejemplo, si realizamos una carta de crédito internacional con la condición para el pago de que se haya recibido la documentación de llegada de las mercancías en la aduana.

Las agencias de envío de dinero

Este es el modo de pago que, normalmente, utilizan los inmigrantes. En esta forma de pago ni el emisor ni el receptor del dinero necesitan tener una cuenta bancaria, ni en los países de origen ni en el de destino. En esta forma tan rápida de envío de dinero las comisiones son muy altas. Destacan las agencias Western Union o Money Gram, entre otras.